¿Qué dijo tras la explosión de la bomba atómica?

Para miles de personas Albert Einstein es el responsable de la creación de la bomba atómica, pues sus estudios y una famosa carta enviada al presidente de Estados Unidos de aquellos años (1939), Franklin Roosvelt, marcaron el inicio del desastre que ocurrió en Japón.
Pero, ¿qué dijo Einstein sobre ese oscuro acontecimiento? La historia cuenta que el físico alemán envió dos cartas donde expresa su remordimiento por no haber podido evitar las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki.
El padre de la teoría de la relatividad, mantuvo correspondencia con Seiei Shinohara, un amigo filósofo japonés durante 1953 y 1954.
“Condeno totalmente el recurso de la bomba atómica contra Japón, pero no pude hacer nada para impedirlo”, escribió el Premio Nobel de Física dos años antes de su muerte, ocurrida en 1955.

LA CARTA DEL DESASTRE
Las cartas de Einstein al filósofo Shinohara demuestran cuánto sentía el físico la necesidad de justificarse. Es que, en 1939, le escribió al presidente Roosevelt advirtiendo que la Alemania de Adolfo Hitler se encaminaba a fabricar la primera bomba atómica.
Roosevelt le respondió el 19 de octubre de 1939, cuando ya se había desatado la II Guerra Mundial, que había ordenado a una junta analizar esa información. El resultado fue la fabricación de la bomba atómica.

En varias ocasiones Einstein trató de persuadir sin éxito al presidente norteamericano de abandonar el programa nuclear. “Si lo hubiese sabido, no hubiera escrito jamás esa carta”, comentó amargamente el científico luego de la masacre nuclear.
“Mi pacifismo es un sentimiento instintivo, un sentimiento que me domina porque el asesinato del hombre me inspira profundo disgusto. Mi inclinación no deriva de una teoría intelectual; se funda en mi profunda aversión por toda especie de crueldad y de odio”, escribió.
Como se sabe, más de 140 mil personas murieron con la explosión y las víctimas de la radiación que fallecieron en los años siguientes superaron las 100 mil en ambas ciudades japonesas.

Einstein predijo en su diario que el sionismo traería la guerra durante décadas



"Einstein in the Holy Land" ('Einstein en Tierra Santa'), un nuevo documental de la cineasta Noa Ben-Hagai basado en un diario del científico, revela unas proféticas opiniones sobre el sionismo y una descripción acertada de la realidad de la contienda entre Israel y Palestina.






El nuevo documental se basa en un diario que Einstein empezó a escribir durante su viaje en 1923 a Yishuv, un asentamiento judío en la Palestina otomana. En sus páginas y a través de cartas privadas, el científico expresó a menudo su opinión sobre el sionismo y el conflicto árabe-israelí, informa el periódico 'Haaretz'.


"Si no podemos encontrar una forma de cooperación y pactos honestos con los árabes, entonces es que no hemos aprendido absolutamente nada durante nuestros 2.000 años de sufrimiento (…) Si los judíos no aprenden a vivir en paz con los árabes, la lucha contra ellos les seguirá durante décadas en el futuro", escribió el científico en 1929 en una carta a su amigo Jaim Azriel Weizmann, que posteriormente sería elegido primer presidente del Estado de Israel.


"Tengo miedo del daño interno que el judaísmo soportará por culpa de un nacionalismo ciego dentro de sus propias filas contra el cual ya hemos tenido que luchar incluso sin un Estado judío. Los dos grandes pueblos semitas tienen un gran futuro común (...) La actitud que adoptemos hacia la minoría árabe representa un examen verdadero de nuestros estándares morales como pueblo", escribió asimismo el genial físico en su diario.


"Einstein manifestó su opinión hace muchos años aunque actualmente estas declaraciones suyas parezcan proféticas. Él se llamaba a sí mismo sionista, pero hoy algunos que conocen el término lo habrían llamado traidor", asegura la directora Noa Ben-Hagai.




FUENTE

Carta de Albert Einstein, rechazando el sionismo y tratándolos de "gente criminal y engañadora"

El año 1948, el célebre científico Albert Einstein envió una carta a Shepard Rifkin, líder sionista de Estados Unidos. Esta carta fue en respuesta a las solicitudes de los sionistas para contar con el apoyo de Einstein. Ésta fue escrita el 10 de abril de 1948, un día después de que el mundo conociera los resultados de la horrorosa masacre de Deir Yassin

El año 1948, el célebre científico Albert Einstein envió una carta a Shepard Rifkin, líder sionista de Estados Unidos, indicando:
"Estimado señor,
Cuando una catástrofe real y final caiga sobre nosotros en Palestina, el principal responsable por ésta será Gran Bretaña, y el segundo responsable serán las organizaciones terroristas nacidas desde nuestras propias filas. No me gustaría verme asociado con esa gente criminal y engañadora.

Sinceramente
Albert Einstein"








Esta carta fue en respuesta a las solicitudes de los sionistas para contar con el apoyo de Einstein. Ésta fue escrita el 10 de abril de 1948, un día después de que el mundo conociera los resultados de la horrorosa masacre de Deir Yassin, donde unos 254 aldeanos palestinos fueron  asesinados y mutilados por bandas sionistas y fue aprovechada y publicitada por el sionismo para generar temor y el éxodo de los palestinos de sus hogares y tierras. De esta forma lograron vaciar Palestina de sus habitantes.
Einstein se refería como "organizaciones terroristas", a los grupos sionistas en Palestina, como Haganá, Palmaj, Irgún o Stern, armados y entrenados por Gran Bretaña, para generar terror en Palestina y obligar a los palestinos a dejar sus hogares, mediante masacres y asesinatos de todo tipo.
Al respecto, Einstein como la gran mayoría de intelectuales judíos y pacifistas a lo largo del mundo, han rechazado el sionismo y sobre todo la política militarista y de exterminio que Israel lleva a cabo. Y cuyas acciones y resultados se ven a diario.

Tenía Einstein compromisos políticos?




 

"Como un joven un tanto precoz, yo estaba impresionado por la futilidad de las esperanzas y los esfuerzos que muchos hombres perseguían sin descanso a lo largo de su vida. Y pronto me di cuenta de la crueldad de esa persecución que en aquellos días se encubría con hipocresía y brillantes palabras más cuidadosamente que lo que sucede hoy"








I Guerra Mundial




Al estallar la Primera Guerra Mundial comenzaron a aparecer públicamente las simpatías pacifistas de Einstein. Noventa y tres intelectuales alemanes de primera fila, incluyendo físicos como Planck, firmaron un manifiesto defendiendo la posición de Alemania en la guerra. Einstein y otros tres firmaron un contra-manifiesto antibelicista. Además, ayudó a formar una coalición no partidista que luchó por una paz justa y por una organización supranacional que     ayudara a prevenir futuras guerras. En su condición  de ciudadano suizo, Einstein pudo dedicar su tiempo a la física teórica, pero continuó buscando medios de reconciliar los bandos opuestos. “Mi pacifismo es un sentimiento instintivo,” declaró, “un sentimiento que se apodera de mí porque el asesinato es repugnante. Mi actitud no proviene de ninguna teoría intelectual sino que está basada en mi profunda antipatía hacia toda clase de odio y crueldad”.



Einstein en Berlin con Max Planck (a la izquierda del todo), el político británico Ramsay McDonald y figuras políticas alemanas. "No te imaginas cuánto cariño me rodea aquí: no están todo el rato esforzándose por recoger las gotas de aceite que mi cerebro va soltando".
Image © E. Salomon, Magnum Photos, New York


Kapp Putsch
Con el colapso militar de Alemania en Noviembre de 1918, proliferaron de forma caótica los comités de trabajadores y de soldados. Una de las lecciones de Einstein en la Universidad de Berlín fue “cancelada debido a la revolución”. El 16 de Noviembre, Einstein fue uno de los firmantes iniciales de un manifiesto anunciando la creación de un partido progresista de clase media, el Partido Democrático Alemán. Después del establecimiento en Weimar de una asamblea democráticamente elegida, Einstein aceptó formalmente la ciudadanía alemana como un gesto de apoyo hacia la naciente república.


El Kapp Putsch de 1920. "Hay una miseria y un hambre terribles en la ciudad", escribió Einstein. "La mortalidad infantil es horrenda... El gobierno es completamente impotente, con los verdaderos poderes luchando entre sí: el ejército, dinero y grupos de socialistas extremistas".
Image © Bundesarchiv Koblenz: Bild 146/71/37/58.



El ascenso al humanismo



Debido a su prestigio científico Einstein pudo actuar como portavoz no oficial de la República de Weimar, y protestó por la continua hostilidad de los antiguos enemigos de Alemania. En 1921 rehusó asistir a la tercera Conferencia Solvay en Bélgica, ya que todos los demás científicos alemanes habían sido excluidos de la misma. En 1922 se unió al recientemente creado Comité de Cooperación Intelectual establecido dentro de la Liga de Naciones. Al año siguiente lo abandonó, disconforme con la impotencia de la Liga frente a la ocupación francesa de la zona del Ruhr en Alemania. Sin embargo, enseguida retornó al mismo. Como uno de los líderes de la Liga Alemana por los Derechos Humanos, trabajó intensamente por mejorar las relaciones con Francia. También hizo numerosas manifestaciones en contra del militarismo.




Einstein llamó la atención sobre numerosas causas, tales como la liberación de presos políticos y la defensa de la democracia frente a la expansión del fascismo. Hizo discursos públicos, declaraciones en la prensa, firmó peticiones. En 1924 defendió las posiciones radicales de la Escuela de Arquitectura de la Bauhaus; en 1927 firmó una protesta contra el fascismo italiano; en 1929 firmó apelaciones para la conmutación de las sentencias de muerte dictadas contra los agitadores árabes en la Palestina británica.


Aunque no fue un judío practicante, Einstein manifestó su apoyo a la comunidad judía de Alemania 




Einstein en una sinagoga de Berlín en 1930, tocando el violín para un concierto benéfico.
Image © Bettmann Archive, New York.







Einstein viajó ampliamente durante los años veinte, tanto como orador a favor de causas progresistas como en calidad de miembro estimado de la comunidad de físicos. Visitó Inglaterra, Francia, Austria, Checoslovaquia y América del Sur y viajó hacia el este hasta Japón, volviendo por Palestina y España. En 1922 fue a Suecia a recoger el Premio Nóbel en física. Entre 1930 y 1933 pasó los inviernos en Pasadena en el Instituto de Tecnología de California, las primaveras en Berlín, y los veranos cerca de Berlín en su casa en Caputh.









La decepción alemana y el sueño americano

Einstein a pesar de todo, había estado cómodo en Alemania, pero fue golpeado en lo mas profundo de su orgullo al tener que salir de su país natal por el antisemitismo creado por el yugo sionista, esa es una de las razones de peso, por las cuales se ve muy cómodo en occidente regocijado en los brazos de un país que le abría las puertas.


"En la medida en que se desató la violencia nazi sólo, o principalmente, contra los judíos, el resto del
mundo espera pasivamente e incluso los tratados y acuerdos que se hicieron claramente con el gobierno criminal del Tercer Reich... Las puertas de Palestina estaban cerradas a los inmigrantes judíos, y ningún país podía encontrarse con admitir a los desamparados. Fueron dejados a morir igual que sus hermanos y hermanas en los países ocupados.
Nunca podremos olvidar los heroicos esfuerzos de los países más pequeños, de los países escandinavos, los Países Bajos, Suiza, y las naciones de los individuos en la parte ocupada de Europa que hicieron todo lo posible para proteger vidas judías".

"As long as Nazi violence was unleashed only, or mainly, against the Jews, the rest of the world looked on passively and even treaties and agreements were made with the patently criminal government of the Third Reich.... The doors of Palestine were closed to Jewish immigrants, and no country could be found that would admit those forsaken people. They were left to perish like their brothers and sisters in the occupied countries. We shall never forget the heroic efforts of the small countries, of the Scandinavian, the Dutch, the Swiss nations, and of individuals in the occupied part of Europe who did all in their power to protect Jewish lives."

Einstein habla sobre el destino de los Judios Europeos



Crédito de sonido:. Voz de América Broadcast, 10 de diciembre 1945
. National Archives Control Number NNSM (s)-306-ES-8554
Imagen © Brown Brothers, Sterling, PA.





La salida de Alemania y la confusión sionista

La humillación empuja a la devoción


El antisemitismo se desarrolló abiertamente por parte de los poderosos partidos de la derecha y por el emergente partido Nazi desde 1919. Los físicos nazis y sus seguidores denunciaron violentamente la teoría de la relatividad de Einstein como “física judeo-comunista”. A veces sus amigos temieron por su seguridad. La extensión de tal antisemitismo tan radical fue una de las razones por las que Einstein, aunque creía en un gobierno global más que en los nacionalismos, dio apoyo público al Sionismo. “En la medida en que una comunidad particular es atacada como tal,”, dijo, “está obligada a defenderse como comunidad, de forma que sus miembros individuales puedan ser capaces de mantener tanto sus intereses materiales como espirituales... En las presentes circunstancias, la reconstrucción de Palestina es el único asunto que tiene un atractivo lo suficientemente fuerte como para estimular a los judíos a una acción colectiva común.” Sin embargo, estuvo en contra de una ley que le obligaba a unirse a la comunidad religiosa judía oficialmente establecida en Berlín. Dijo: “Tanto como me siento a mí mismo judío, me siento también fuera de las formas religiosas tradicionales.”
La "Torre Einstein". Este observatorio, diseñado por Erich Mendelsohn y construido cerca de Berlín hacia 1920, albergó aparatos para observar el Sol. Su modernidad perturbó a algunas personas.
Image © The Albert Einstein Archives, The Jewish National & University Library,
The Hebrew University of Jerusalem, Israel.


Ardía Alemania en una ola de antisemitismo a raíz del sionismo


A medida que el movimiento Nazi crecía, Einstein contribuyó a organizar un grupo no partidista, dentro de la comunidad judía, que proponía una acción unida contra el fascismo. La llegada de Hitler al poder, dando apoyo oficial al peor anti-semitismo nacido del odio al sionismo, fue haciendo imposible la posición de los judíos y de otros opositores. Después de su salida de Alemania en 1932, Einstein no retornaría nunca. En Marzo de 1933 renunció de hecho a la ciudadanía alemana. La propiedad que había dejado en Alemania fue confiscada, y su nombre apareció en la primera lista elaborada por los nazis con ciudadanos a los que despojaban de su ciudadanía.

Una fotografía tomada por un paseante que reconoció a Einstein por otras fotos publicadas, en diciembre de 1932. Más tarde Einstein escribió al fotógrafo, "la foto se hizo unos días antes de que dejara Berlín para siempre".
Image © The Albert Einstein Archives, The Jewish National & University Library,
The Hebrew University of Jerusalem, Israel.




Muchas universidades extranjeras estaban ansiosas por invitar al renombrado científico, pero ya había aceptado una oferta para unirse al Instituto de Estudios Avanzados de Princeton, New Jersey. Llegó a los Estados Unidos en Octubre de 1933, y en 1940 se hizo ciudadano americano. Su esposa Elsa murió en 1936. Una de las hermanas de Elsa y la secretaria de siempre de Einstein, vivieron con él en Princeton y le ayudaron en las tareas cotidianas.